La madre del niño Gabriel Cruz puede exigir el embargo de cualquier material audiovisual que reproduzca imágenes de su hijo
La madre del hijo Gabriel Cruz, asesinado en Almería por la entonces pareja de su padre, inició una nueva lucha en defensa de la privacidad del menor y contra la difusión de imágenes o información vinculada a la víctima, ante la posible grabación de un nuevo documental sobre el caso que conmocionó a la opinión pública en febrero 2018.
Patricia Ramírezque ha celebrado este sábado una concentración en Almería en defensa de sus derechos, se apoya en su reivindicación de la distribución de datos de menores por parte de la Ley andaluza de infancia y adolescencia, aprobado en 2021, tres años después del asesinato de Gabriel. En su artículo 46.5 pide expresamente la protección del derecho al honor, a la intimidad personal y a la autoestima de niñas, niños y adolescentes, «incluso en los casos de muerte traumática o desaparición«. «La distribución de la imagen de la persona o personas menores de edad deberá ser autorizada expresamente por sus padres o sus herederos», dice textualmente la norma.
Ramírez puede incluso solicitar a la Corte el decomiso de material audiovisual que no cumpla con lo establecido en esta ley. Esto es lo que afirma el profesor de Derecho Civil de la Universidad de AlmeríaRamon Herreraexperto en protección de la privacidad en los medios de comunicación y redes sociales, y diputado del PP cuando el Parlamento tramitó el citado texto normativo, en cuya elaboración fue decisivo el testimonio de la madre de Gabriel Cruzque compareció en el Parlamento para explicar cómo el uso reiterado de las imágenes de su hijo en la televisión o en las redes sociales había exacerbado el dolor de la familia.
El caso del niño Gabriel Cruz dejó una huella en el derecho andaluz al que ahora apela Patricia Ramírez. Su aplicación impide la divulgación de cualquier información que afecte la privacidad de la familia sin el consentimiento de los padres. “Especialmente cuando no hay ninguno nuevo hecho lo que justifica un presunto interés general del medio», explica Ramón Herrera a .
El artículo 20.4 del Constitución española afirma que las libertades de información y expresión «tienen sus límites respecto de los derechos al honor, a la intimidad, a la autoestima y a la protección de la juventud y la niñez».
«Es cierto que el derecho a la intimidad es muy personal, y se extingue con la muerte», afirma Ramón Herrera, «pero también es cierto que la Ley 1/1982 permite el ejercicio de acciones para proteger los derechos del causante de ejercer su elevar.» El catedrático destaca que el tratamiento de la información relativa a menores debe realizarse «con mayor garantía de los derechos fundamentales y con una Interpretación restrictiva del ejercicio de la libertad de información y expresión.«, como ha establecido la jurisprudencia.
Al respecto, recuerda que los medios «ya contaron detalladamente el caso del pequeño Gabriel», «y no parece que se brinde información alguna». cualquier relevante. En definitiva, no se puede publicar contra la voluntad de los padres.»
Finalmente recuerda esto. Ley 4/2021, de 27 de julio, de la Infancia y la Adolescencia de Andalucía Protege especialmente a las familias en estos casos. «Tuve la oportunidad de participar como legislador, y recuerdo perfectamente la intervención de Patricia Ramírez ante la comisión parlamentaria encargada de tramitar la norma en la Cámara Autónoma», añade. Ramón Herrera se encuentra actualmente secretario general de universidades en el gobierno de Juanma Moreno.
La ley andaluza obliga a las administraciones públicas andaluzas a velar, en el ejercicio de sus competencias, por el respeto al derecho al honor, a la intimidad personal y a la autoestima de las niñas, niños y adolescentes. Se dará especial consideración a “aquellos menores que en una situación vulnerable y en situación de desprotección», apunta.
«En la protección de este derecho se tendrá especial cuidado con sus datos personales, con deber de confidencialidad exigido por los profesionales que tengan conocimiento de ellos en el ejercicio de su función profesional, por las personas receptoras o por las personas colaboradoras de la Entidad Pública. , así como a través de los medios de comunicación.»
La ley insiste en la obligación de «promover campañas informativas a las familias antes de la uso de videos o fotos de menores en Internet y redes sociales, con el fin de erradicar la mala práctica de compartir la imagen de niñas, niños o adolescentes, que puede derivar en abusos.
«Desde el principio no quisimos tomar protagonismo con esto, rechazamos todo tipo de ofertas que nos hacían y constantemente manifestábamos que no queríamos participar en la realización de documentales o series con la muerte de Gabriel», explica Patricia Ramírez en el video publicado en redes sociales con el que vuelve a hacer un llamado al apoyo ciudadano en su lucha.
La madre del niño asesinado no da detalles sobre el trabajo audiovisual que supuestamente se prepara sobre el caso, pero acusa a los promotores de intentar «lucrar» con la tragedia. «Lamentablemente en este momento hay irregularidades y personas que intentan sacar provecho de su muerte«quien no sólo daña su memoria después de quitarnos la vida, sino que también odia nuestro dolor y no hace caso a las reglas, rompiéndolas», añade.
El precedente de La Sexta
Al invocar ese derecho a la intimidad familiar, Patricia Ramírez consiguió el programa de televisión Equipo de investigación se comprometen a dejar de difundir el informe Ana Julia Quezada: retrato de una asesinaeso La Sexta ha tenido reposiciones regulares desde su estreno el 15 de marzo de 2019. Luego de un llamado público de la madre de Gabriel, la dirección del programa decidió eliminarlo de su programación de distribución. la dirección de Equipo de investigación Le pedí disculpas a Patricia Ramírez.