El jurado absuelve a la mujer acusada de asesinar a su marido en A Coruña por ‘pacto suicida’
El jurado que juzgó la semana pasada a una mujer por matar a su marido en la localidad coruñesa de Monfero decidió declararla «inocente», siguiendo así la tesis de su defensa, que sostuvo que hubo un «pacto suicida» entre la pareja que ambos pretenden poner fin a sus vidas simultáneamente.
La sala segunda de la Audiencia Provincial de A Coruña debe dictar sentencia absolutoria una vez este miércoles sobre esta mujer, y tras dos días de deliberación el jurado llegó a la conclusión de que no es responsable del delito. Los miembros del tribunal popular llegaron a la conclusión de que es «inocente» del delito de asesinato que le atribuye la Fiscalía y también de «colaboración en el suicidio», que introdujo como calificación alternativa.
Para el jurado, marido y mujer pretendían suicidarse juntos y ambos tomaban la misma medicación, aunque ella no murió sólo porque recibió atención médica. Ambos, según el veredicto, padecían depresión y decidieron quitarse la vida de manera pactada y conjunta.
Los hechos tuvieron lugar el 19 de julio de 2021, cuando ella tenía 68 años y él 75. La fiscalía siempre ha sostenido que se trató de un asesinato, argumentando que el hombre padecía «demencia o Alzheimer» y «agresividad y mantenía actitudes negativas». «. » » a ella, que vivía en una situación de «desesperación o ansiedad». Ese día, «abrumada por la evolución que provocaba la enfermedad», le dio unas pastillas y lo mató. Alternativamente, ella admitió una «cooperación suicida» en la que él quería suicidarse y lo ayudó dándole las pastillas.
Sin embargo, la defensa mantuvo desde el principio la versión de suicidio conjunto, pues también tomó numerosos medicamentos, aunque no falleció tras recibir ayuda médica. En su declaración en el juicio, la acusada, ya septuagenaria, insistió en que planeaba suicidarse con él «de mutuo acuerdo» y negó el supuesto deterioro cognitivo de su marido.
Así aseguró que «éramos nosotros dos los que queríamos irnos». Además, insistió en que amaba a su marido y que no tenía motivos para matarlo. «Nos sorprendió en todos los sentidos, era un hombre bueno y trabajador. Por qué tuve que matarlo, es imposible», declaró, insistiendo en que su marido estaba «consciente» de lo que ambos hacían y participaba. «activo.» De hecho, él mismo tomó la medicación que acabó con su vida.
«Más que un delito, es un drama», argumentó durante el juicio la defensa de esta mujer, que fue condenada a 26 años de prisión por un delito de asesinato con las atenuantes de arrebato u obstinación y las agravantes de relación. La fiscalía también pidió que indemnice a cada uno de los niños con 23.805 euros, aunque no la acusaron en este caso.