La producción de coches chinos en Europa comienza en España
Si hay una característica que define a la industria automovilística china actual, además de tener mucho dinero, es su rapidez para adaptarse o responder a los retos. Y Cuando sus marcas ni siquiera están consolidadas comercialmente en Europa -salvo algunas excepciones- ya han puesto en marcha la segunda parte del plan: la instalación de fábricas en el Viejo Continente.
El grupo Chery y la empresa española Ebro (propiedad de EV Motors) cerraron ayer oficialmente el acuerdo al que llegaron unos días antes para fabricar coches en Barcelona. En un acto patrocinado por el presidente Pedro Sánchez, Se ha confirmado que esta producción comenzará en unos meses. Además, se revelaron datos clave: 50.000 unidades en dos años; 150.000 en 2029; creación de hasta 1.250 puestos de trabajo y una inversión de 400 millones de euros, agregando asistencia pública.
Tener una fábrica ya equipada y El hecho de que los primeros automóviles se ensamblen a partir de piezas grandes enviadas directamente desde China acelerará esta industrialización, Según Pedro Calef, director general de Ebro, esto convierte a Chery en el primer fabricante chino en producir turismos en grandes volúmenes en Europa. Porque su compatriota BYD desde 2017 los autobuses están en el Viejo Continente y En diciembre de 2023 eligió Hungría para instalar una fábrica de turismos. Pero no estará listo hasta finales de 2025 o principios de 2026. Se habla de una capacidad de hasta 300.000 unidades.
Otros fabricantes interesados
Sin contar con las plantas de baterías que ya han sido anunciadas como la de Imaginar en Extremadura, Estos dos movimientos son los primeros, pero no los únicos. MG (marca propiedad de Saic)Lleva tiempo explorando diferentes localizaciones, con España bien situada en las quinielas; Donfeng está negociando con el gobierno italiano, que también «se deshizo» de Chery, para producir alrededor de 100.000 vehículos al año y GWM (Motores de la Gran Muralla) Maneja un escenario de entre cuatro y cinco años «sin excluir a España», aunque apunta más a Europa del Este.
Aunque el rizo podría llegar al costado de motores de salto, gracias a ti proyecto conjunto Con Stellantis podría montar sus coches eléctricos en Polonia o Italia, en plantas del consorcio liderado por Carlos Tavares. Sí, el mismo ejecutivo que la semana pasada advirtió al Gobierno italiano de afrontar las consecuencias -que podrían llevar al cierre de fábricas- si favorecen o ayudan a la localización industrial de los chinos en el país.
Más reputación, sin comisiones
Su estrategia es clara. Por un lado, las plantas en Europa les permitirán protégete de investigaciones como la de Bruselas abrió en septiembre pasado debido a los subsidios ilegales para sus automóviles y podría terminar en aranceles adicionales. Ya pagan el 10%, que se ahorrarán, aunque también adoptarán mayores costos de fabricación y mano de obra. Por otro lado, fabricar en el Viejo Continente les acercará a clientes potenciales, y también aumentará su reputación y visibilidad.
Por ejemplo, en Cataluña. «Hoy sale el sol» para los ex empleados de Nissan, afirmó el presidente del Gobierno. “Tenemos la reindustrialización de una de las plantas más importantes de los últimos 80 años en Cataluña», añadió su homólogo catalán, Pere Aragons. Porque el proyecto de Chery y Ebro se desarrollará en las instalaciones que Nissan tenía en Barcelona, cuyo cierre anunció en plena pandemia y que produjo su última unidad en diciembre de 2021 tras casi 45 años de actividad. Con su salida, 3.200 trabajadores quedaron en el limbo, de los cuales 1.250 no pudieron ser reubicados en esta etapa.
Renacimiento del Ebro
Es más, el acuerdo firmado supondrá un segundo renacimiento: el del emblemático Ebro, que habría cumplido este año 70 años, aunque llevaba desaparecido desde 1987, cuando lo decidió Nissan. guárdalo en un cajón. Su nuevo CEO reveló que el acuerdo con Chery prevé dos ‘joint ventures’, ambas con participación mayoritaria española. El primero, comercial, en distribuirLos nuevos vehículos Ebro, que también se producirán en Barcelona. Para empezar, dos SUV, uno de gama media y otro de gama alta, ambos híbridos enchufables. Luego le seguirán dos más en 2025, siempre diseñados con tecnología Chery. Esto, mientras continúa el desarrollo de la pickup 100% eléctrica que fue presentada en el Salón del Automóvil de Barcelona 2023.
El segundo tramo es el industrial. Así, el renombrado La Fábrica de Ebro empezará a fabricar coches Omoda en unos meses, concretamente el modelo 5 en sus versiones de combustión y 100% eléctrica. Antes de final de año será el turno del primero de los Ebro, para posteriormente sumar otros vehículos como el SUV premium Jaecoo 7 (otra de las marcas de Chery).
Al principio, al ser una asamblea parcial, Sólo se crearán 150 puestos de trabajo, aunque su número irá creciendo a medida que la planta se vaya haciendo cargo del resto de procesos productivos. También se sumarán proveedores locales. Asimismo, está prevista la creación de un centro de I+D+i para llevar a cabo adaptaciones de los vehículos al mercado y gusto europeo.
Aunque fue Zhang Guibing, vicepresidente de Chery Internacional y quién hizo el trato con Calef, el que puso la guinda del pastel. «Se trata de una colaboración estratégica entre dos países que nos permitirá potenciar aún más la alta calidad de la industria automovilística española», afirmó, añadiendo que Una vez que alcancen la escala necesaria, la fábrica se convertirá en «una importante plataforma de exportación de Chery al resto d». El año pasado, el fabricante chino produjo casi 1,9 millones de coches, de los cuales 940.000 se exportaron.