
Con sorprendente claridad, dio por sentado el ayer. Baya Aragonés decadencia irreversible Sanchismo Así, se acabaron las concesiones del gobierno al independentismo catalán. El titular de la Generalitat en Palau compareció de forma inusual para valorar las derivadas de las elecciones municipales, pero parece que analizaba de antemano las consecuencias de la victoria del centroderecha en las elecciones generales del 23 de julio.
Aragonés otorgó la plena condición de facto de un posible gobierno entre el Partido Popular y Vox y reconoció que con ese ejecutivo en La Moncloa sería “imposible” mantener una negociación bilateral con el Estado que permitiera a la secesión obtener una amnistía para los separatistas dirigentes que organizan el 1-x o reforman el código penal para eliminar el delito de Sedición. “Estamos en un nuevo escenario”, admitió.
La estrategia de Aragón para sobrevivir a dos años de legislatura aún por delante se desmorona, porque había confiado todo su relato a la necesidad de mantener viva la conversación secesionista con el Gobierno a través de su última: una carta aclaratoria al Gobierno canadiense pactando con el país sobre los términos de un referéndum legal e internacionalmente comparable. El presidente incluso encargó a un grupo de expertos que sentaran las bases de este nuevo voto separatista, que ahora considera truncado.
Fuentes del Gobierno precisan que el Sanedrín de Aragón mantiene de momento su labor académica, pero que el presidente no transmitirá sus resultados al resto de partidos catalanes, como pretendía, ante la proximidad de las elecciones generales.
Después de emitir el certificado político de defunción Pedro Sánchez En una breve intervención institucional, Aragón se ve en la necesidad de impulsar la reunificación del independentismo para buscar en el interior el apoyo que ahora le faltará en Madrid. Para ello, el presidente abogó ayer por la formación de un “frente común independentista” que “defienda Cataluña” y preserve los ejes principales del proyecto nacionalista, a saber, las “instituciones catalanas”, “el derecho a decidir la política futuro del territorio”. Cataluña” y “La Lingua”, o lo que es lo mismo, son monolingües en catalán.
Aragón concluyó que tras perder más de 350.000 votos en el 28-M -de los que 302.000 pertenecían a ERC-, el independentista pedía a sus partidos “comprenderse” y abandonar las profundas diferencias que ahora les separan.
Sin embargo, el presidente de la Generalitat evitó aclarar ayer si ERC está preparada para acudir a las urnas con una lista única separatista como sugirió el lunes el secretario general de Gonz, Jordi Turol. “Corresponde a las partes trabajar las fórmulas y la pertinencia para que esto sea posible”, limitó al comunicado.
La supuesta reunificación del independentismo supondría también el fin de los acuerdos entre ERC y el PSC, que desembocaron en la aprobación de los presupuestos de la Generalitat. Aragón pidió ayer “la formación de coaliciones independentistas en los ayuntamientos”, lo que dificulta que ERC apoye la maniobra de los socialistas catalanes para nombrar alcalde de Barcelona a Jaume Colboni, en lugar de Xavier Trias, el candidato . La mayoría de los votos el domingo pasado.
El jefe del general, que favoreció la salida de Guntes del Gobierno, se ve ahora obligado a dar un paso atrás e intentar restablecer la relación entre los independentistas a los que dio la espalda para dar prioridad al entendimiento con el PSC y común.
El primer gran acuerdo que tendrá que abordar Aragón -al margen de una posible estrategia conjunta de los generales- será la sustitución de Laura Porras como presidenta del Parlamento por su condena por corrupción. ERC tendrá que aceptar el nombre que le imponen los neoconservadores, y la lista incluye candidatos muy similares a Carles Puigdemont, exalcalde de Vic y Girona. Ana Ira Y marta madrinas.
“Volvamos a encontrarnos, pero por la independencia claro”, advertía ayer el prófugo, que advertía de una oportunidad para que Juntz recupere el liderazgo de la causa separatista.