
La primera consecuencia interna en Ciudadanos del fracaso de la moción de censura en Murcia es una remodelación del núcleo duro de Inés Arrimadas, que ha sido muy cuestionado tras la fallida operación. Los dos subsecretarios generales del partido, Carlos Cuadrado y José María Espejo, han decidido dar un paso atrás y renunciar a sus responsabilidades organizativas. La líder renuncia a sus dos campeones principales, pero ambos seguirán siendo parte del ejecutivo permanente, el centro de la decisión. En la reunión extraordinaria de la dirigencia, que se celebrará en la sede del partido este lunes, Arrimadas propuso una ampliación de la junta ejecutiva permanente, de siete a dieciséis miembros, en la que daría acceso a líderes territoriales clave, como el diputado. . La alcaldesa de Madrid Begoña Villacís, el exvicepresidente de Madrid Ignacio Aguado y el vicepresidente de la Junta de Andalucía Juan Marín. El líder también incluye a críticos como Toni Cantó, coordinador de la Comunidad Valenciana, y propone a Edmundo Bal como nuevo portavoz de su equipo.
La salida de Cuadrado y Espejo ha sido reclamada por varios dirigentes, como el valenciano Toni Cantó, que ya ha pedido la dimisión tras el desplome del partido en las elecciones catalanas. Entonces Arrimadas decidió apoyarlos, pero esta vez se alejaron para proteger al líder. Si no se hubieran ido, las responsabilidades se habrían manifestado directamente en contra de Arrimadas.
El líder del partido decidió ampliar el ejecutivo permanente, el núcleo de la toma de decisiones del partido, con varios líderes territoriales tratando de apaciguar la crisis interna provocada por el fracaso del operativo para expulsar al PP de Murcia. Entre los perfiles recogidos se encuentran la teniente de alcalde de Madrid, Begoña Villacís, y el exvicepresidente de la Comunidad, Ignacio Aguado, según la propuesta sobre la mesa, que aún puede sufrir modificaciones. Arrimadas consultó con los principales dirigentes de Cs durante el fin de semana para pedirles su opinión sobre los próximos pasos a seguir, y varios de ellos le aconsejaron hacer cambios en esa dirección.
Se prevé que el encuentro, que comenzó al mediodía de esta mañana, sea intenso y largo, y queda por ver que la salida de Cuadrado y Espejo de sus responsabilidades orgánicas, sin abandonar la permanente, satisfará a los más críticos. A su llegada al encuentro, Arrimadas recibió el apoyo expreso de su liderazgo por parte de varios barones, como Juan Marín, vicepresidente andaluz, y Daniel Pérez, coordinador de Aragón. Pérez recuerda que el partido ya estaba ‘en la sala de autopsias’ cuando Arrimadas aceptó la presidencia. El coordinador de Cs en Cantabria, Félix Álvarez, fue contundente: “Somos un meme de nuestro propio partido”.
La reunión extraordinaria del Ejecutivo del lunes, exigida por varios dirigentes autonómicos -como el andaluz Juan Marín, el valenciano Toni Cantó o la madrileña Begoña Villacís- viene precedida de un fuerte temporal, sobre todo tras el fichaje por parte del PP de Fran Hervías. , exsecretario de la Organización Cívica. El domingo, ex dirigentes del sector crítico, como la senadora Ruth Goñi, la diputada aragonesa Susana Gaspar o la vicepresidenta del parlamento extremeño, Marta Pérez, salieron en defensa de Hervías. Más poderosos fueron los ex pesos pesados del entrenamiento en la época de Albert Rivera, como el albacea Juan Carlos Girauta, que dio la “enhorabuena” al PP por el fichaje de Hervías, o el exdiputado Marcos de Quinto, que afirma Cs que este Lunes “Hay respuestas correctas y no hay argumentos”.