
Los miembros de la Policía Nacional y la Guardia Civil fueron vacunados en Cataluña el jueves. Lo hacen un mes después de que comenzara el juicio con los Mossos d’Esquadra y la Policía Local. La Generalitat asegura que el proceso logístico fue algo más complicado, con pequeños municipios que debían vacunarse, obtener el censo y otros detalles, pero que la vacunación finalmente comenzó sin incidentes. La Delegación del Gobierno en Cataluña coincide en que fue un proceso acordado, con diferentes reuniones y que se inició en cuanto se cerró todo.
La Unión SUP de la Policía Nacional Se quejó en un comunicado el miércoles de que Cataluña es la única región que aún no ha sido vacunada. “Una vez más, vemos que se imponen intereses políticos en contra de las normas prescritas por el propio Ministerio de Salud”, lamentó el sindicato. Su secretario general en Cataluña, Luis Mansilla, explica que la situación ha cambiado desde entonces. “Ayer por la tarde empezaron a vacunar en Igualada. Hoy están planificando Manresa y el aeropuerto, que está previsto el lunes y martes, y se ha vuelto a programar”, dice.
La delegación del Gobierno niega que hubo un atraso en los plazos, por lo que no concluyeron los pasos que debían seguirse para llevar a cabo la vacunación de la mejor manera en diferentes reuniones. Después de que el ministro de Interior, Miquel Sàmper, anunciara que había comenzado la vacunación de los Mossos y policías locales, la delegada del gobierno Teresa Cunillera se puso en contacto con una carta de Sàmper ante rumores que decían que la policía nacional y la guardia civil están excluidas. Sàmper respondió que también habían entrado en los planes de vacunación.
Luego de varias reuniones, finalmente comenzaron a entregar las primeras dosis, que se llevarán a cabo en las instalaciones policiales, y en algunos casos de manera conjunta para policías y guardias civiles. Los censos también fueron un asunto delicado, no transferir datos personales, como confirman todas las partes involucradas. En Cataluña trabajan unos 3.400 policías nacionales y 3.500 guardias civiles.